¿Qué no está funcionando en la gestión de tu tiempo?

¡Hola querida Tribu Inteligente!

Cuando tenemos una posición retadora o dirigimos nuestro propio negocio hacemos el “mayor esfuerzo” tratando de lidiar con las difíciles exigencias actuales, sin perder el equilibrio vida y trabajo, de cara a las 24 horas del día que todos tenemos.

Batallamos contrarreloj por ganar tiempo para lo que más nos importa. Comenzamos el día con las mejores intenciones, pero luego las reuniones, los correos electrónicos interminables, el flujo infinito de interrupciones, las complejas decisiones que tomar y un largo etcétera, nos da la sensación de estar siempre agotados y distraídos.

Y ¿Cuáles son los consejos recibimos? Son los mismos que llevamos oyendo desde hace muchos años: Trabaja duro, apasiónate, concéntrate en tus fortalezas, practica mucho, mantente firme, se agradecido, lleva una agenda.

No hay duda de que estos consejos son populares, positivos y útiles. Son sólidos y atemporales. No puedes fallar con esta filosofía y definitivamente es un gran discurso de introducción o apertura.

Pero ¿Son adecuados para ti estos consejos?

De seguro conoces a personas muy esforzadas y aplicadas que siguen todas estas pautas y aun así no están cerca de los niveles de rendimiento esperado. Viven una vida extenuada porque todos estos hábitos y rutinas también se han vuelto parte de “su trabajo”, no celebran sus progresos, no disfrutan ni sienten el beneficio de una adecuada gestión de su tiempo y ni siquiera están cerca de lo que quieren lograr en la vida.

También conozco, en particular, a mucha gente que sabe cuáles son sus puntos fuertes y por mejorar, sin embargo, a pesar de eso les sigue costando tener claridad o no tienen ni idea de qué hacer para que su día a día sea efectivo. Entonces, ¿Cuál es el problema?

Te respondo con otra pregunta ¿Alguna vez has pensado que tu forma de gestionar tu tiempo está muy ligada a tu personalidad?

Si comenzaras a ver cuáles herramientas son las que funcionan para ti, luego de entender cómo eres, cómo te relacionas con los demás, cómo tomas decisiones y cuáles son tus fuerzas impulsoras. Te aseguro que comenzarías a mirar el tiempo de otra forma.  Mi seguridad viene de que yo misma viví ese proceso de búsqueda de gestionar mejor mi tiempo a raíz de una enfermedad, pero no fue hasta que me hice Analista Conductual que comprendí donde estaba la clave. Todo esto está asociado a lo que yo he llamado

RENDIMIENTO INTELIGENTE.

El rendimiento inteligente es un estilo de vida que busca añadir enfoque a tu forma de gestionar tu tiempo, quedándote con los recursos necesarios para construir tu camino hacia los resultados que quieres lograr.

Me gusta mucho esta frase de Aristóteles y va muy alineada con mi teoría:

“La excelencia es un arte ganado a base de entrenamiento y hábitos. No actuamos correctamente porque tengamos excelentes virtudes, sino que somos virtuosos porque actuamos correctamente. Somos lo que hacemos repetitivamente. La excelencia, entonces, no es un suceso, sino un hábito”.

Si esas virtudes, micro habilidades y fortalezas que nos habitan no las ponemos continuamente al servicio de nuestra gestión del tiempo, entonces todas las fórmulas que podamos encontrar para ser productivos tampoco las podremos llevar a su máxima expresión.

En conclusión, para un alto rendimiento el método alineado a tu personalidad es la clave. Tener una rutina inteligente, unos principios, una metodología, ceñirse a los pasos correctos es lo que nos hace tener éxito en la gestión del tiempo. Puedes incluso ser experto gestionando el tiempo, pero no necesariamente tener un rendimiento inteligente y lograr los resultados que SI quieres en tu vida.

Hasta una próxima vez,